lunes, 27 de noviembre de 2017

A los pies del Pienzo *



Un té, dorado como la tarde,
me acompaña a los pies del Pienzo.
El mar, a mi espalda, me llama,
con su cantar de olas y ensueños.

Cae el sol sobre el naranjo,
A su sombra se oculta el tejo.
Ya sin luz, duerme sereno,
verde, gris, negro...quieto.

Estoy leyendo a Miguel D’Ors,
a sus manzanas robadas.
Caigo en la ensoñación,
retraso la vuelta a casa.

La luna se está asomando,
poniéndome en evidencia.
“Es hora”, dice paciente.
“seguro que alguien te espera...”

El Pienzo, limpio y sereno,
y el mar, miran a otro lado.
Recojo el libro y la mesa.
La tarde ya se ha apagado.


*







martes, 21 de noviembre de 2017

Sopla el nordeste


Sopla afilado el nordeste.

El mar se agita, incómodo.

La chimenea encendida.

Recuerdos de la lluvia,

de las tardes de domingo.

La estufa de butano.

Diez metros cuadrados

de calor ficticio.

Leyendo libros viejos

del pasado de otros,

de infancias antiguas.

La cena estaba a punto.

Siempre estaba a punto,

la cena.

La seguridad feliz

envolvió mi infancia,

que se creía inmortal.



miércoles, 15 de noviembre de 2017

Haiku


        
            En el jardín

            un brillo de oro intenso.

            Sueños de otoño.


sábado, 11 de noviembre de 2017